martes, 8 de abril de 2008

reencuentros

Bueno, hoy me he decidido nuevamente a charlar un poco en mi blog. Pensé que era un buen momento para hacerlo, un buen momento para reflexionar sobre como ha transcurrido el mes de marzo. Aquí estoy, con mi amigo Chuck Loeb tocando la guitarra (me encanta el jazz), dejando que las palabras fluyan de mis dedos, dejando que mi mente viaje recordando momentos pasados y momentos que vendrán.
Este mes de marzo creo que ha sido fundamental para mi, las salidas han sido de mucha calidad tanto humana como física, mi cuerpo creo que se encuentra en un buen momento y dispuesto para que llegue el día de la partida, y solamente queda que llegue el sábado 19. Mi mente se ha dado cuenta de que empieza el baile la semana que viene, como si no fuera a llegar nunca, y mi hija empieza a intensificar más ese "chantaje emocional" al que se me somete día a día. Ella no quiere que me vaya, no entiende esta locura. Se que el momento de salir de casa va a ser duro y emotivo, además las despedidas nunca me han gustado, jamás. Siempre he tratado de evitarlas con excusas, escurriéndome, con evasivas, cualquier recurso es bueno. La verdad es que soy un tio un poco sensiblero, en algunas ocasiones no puedo controlar mis emociones, pero soy así. Quizás suene a cursilada, quizás sea un poco jilipollas, pero soy así.
Durante este último mes y medio he estado saliendo los domingos a montar, gracias a Javi.Rigor, con unos amigos de Rivas Vaciamadrid. Han sido salidas muy buenas, variedad de caminos, ritmo intenso y buenas kilometradas. Me encuentro muy a gusto con estas personas que me han abierto sus puertas. Dos de ellos, Javi y Miguel, van a entrar a formar parte del grupo de personas que hemos llegado en dos ruedas a Santiago, quizás coincidamos en Santiago a la vez. Ellos salen de León el 26 de abril y llegarán a Santiago el 30 de abril, por mi parte creo que también llegaré el 30 o el 31, depende un poco de la climatología. El Camino se que será duro (nada que ver con el francés), físicamente creo que responderé y la mente espero que no me juegue ninguna mala pasada.
Ayer estuve hablando con Iñaki Ialkain (tio fantástico), recordando la quedada de Burgos, los turrones de navidad y muchas anécdotas más. Iñaki se ofreció a recibirme en Irún para acompañarme los primeros kilómetros de mi camino, y claro mi alegria es grande, muy grande, por poder darle un abrazo en persona y poder compartir algunos momentos juntos.
Este Camino promete, este camino va a ser un reencuentro con Iñaki, Kilikolo y Roberbolo (¡como deseo estrecharos en un abrazo), este camino va a ser un reencuentro con mis alforjas (espero que no pesen mucho), este camino intentará ayudar en algo a los que vienen detrás, ofrecerles datos que les puedan ser útiles, además los que vienen detrás son, nada más ni nada menos, el jefe Tomás y Teide. ¡Vaya tela!
Un abrazo a todos